Trump revierte aranceles a los fabricantes de autos: ¿empiezan las negociaciones?

Trump revierte aranceles a los fabricantes de autos: ¿empiezan las negociaciones?

Max Díaz Por Max Díaz

15 de Mayo de 2025

Después de imponerle aranceles incluso a islas donde solo vivían pingüinos, Donald Trump empezó a negociar. Lo que un chileno llamaría negociar con el tejo pasado y un mexicano tirar bien alto.

Y uno de los mercados que mejor refleja esta tensión es el de los automóviles

Trump tiene una relación cercana con los votantes del Rust Belt (esa zona industrial del Midwest que ha visto un declive importante en las últimas décadas); y también con los dueños de las tres grandes automotoras: Ford, Chrysler y General Motors

Pero también se lleva bastante bien con Elon Musk, un representante de los autos eléctricos (Ev) que pretenden destronar a sus contrapartes a gasolina

Y mientras volaba a Michigan –una ciudad donde se fabrican buena parte de los autos norteamericanos– firmó una orden que le quitaba cualquier arancel extra a fabricantes de autos que ya estuvieran pagando el impuesto del 25% por acero o aluminio. Además ofreció que optaran a una reducción arancelaria para una parte del coste de sus componentes importados, aunque estos beneficios se eliminarán gradualmente en los próximos dos años.

Como bien nos cuenta Laura Cantú, Supply Chain Manager de MFG, es enorme la cantidad de preguntas sin respuesta que se nos presentan hacia el futuro:

“¿Cómo se calcula la tarifa si compro en China, lo traigo a Canadá para acabado y  pasa por USA a pintado? ¿Quién va a cubrir el extra de la tarifa? ¿Empezamos a recalcular el impacto? ¿Hay que checar inventarios para ver hasta cuándo cubrimos para analizar el impacto? ¿Cuándo hacemos juntas con los brokers? ¿Quién manda la primera junta con el cliente?”.

Y nos recuerda que el ejecutivo de compras tiene un rol fundamental a la hora de re-pensar el stock en el mundo arancelario: “uno no se puede quedar de brazos cruzados: así que se empieza a negociar con los proveedores que proponen tarifas altas, se buscan nuevas opciones de envío de mercancía, se evalúan almacenes de distribución en México en lugar de USA. Y así sucesivamente.”

Pero claro, la idea que subyace es que “la incertidumbre vence a cualquier industria y a cualquier presupuesto”.